Henry David Thoreau fue, entre muchas otras cosas, escritor, ensayista y filósofo. Un gran pensador con espíritu crítico respecto a la política de su tiempo y un amante de la naturaleza. A partir de sus experiencias, escribió varios libros con reflexiones personales, aún vigentes y válidas. Se le considera uno de los padres fundadores de la literatura norteamericana. Algunos de sus libros son:

 

 

 

 

 

    Es el nombre que Henry D. Thoreau y su hermano John pusieron a la barca con la que recorrieron el río Concord en 1840. También es el nombre indio del río Concord. A raíz de la posterior muerte de su hermano, Henry D. Thoreau decidió escribir la memoria de ese viaje y sus pensamientos sobre “la amistad y el amor, sobre la literatura y la filosofía, sobre los grandes escritos de la tradición occidental y los textos sagrados de India y China, sobre la vida de los primeros colonos y la de los últimos indios, sobre la naturaleza salvaje y la serena Nueva Inglaterra. Y confirma que Thoreau era tanto el hombre de los bosques como el hombre de los ríos”

 

 

 

 

 

   Es una crítica a la autoridad del Estado y un libro que expone sus ideas políticas. Se manifiesta en contra de la esclavitud y la guerra contra México, promulgando la insurrección. De hecho, en 1846 se negó a pagar impuestos por estar en desacuerdo con el Estado, y por ello fue encarcelado en Concord.

 

 

 

 

 

   El autor vivió durante dos años y dos meses (1845-1847) en una cabaña que él mismo construyó a orillas de la laguna Walden, para vivir la vida intensamente. Este libro recoge con detalle cómo fue su estancia allí y sus reflexiones filosóficas a favor del ritmo tranquilo de la naturaleza. También hace una crítica, por oposición, a lo innecesario de la sociedad y a lo frenético de la ciudad, donde las personas solo trabajan y no tienen tiempo de pensar sobre lo que hacen. Así, Thoreau habla sobre una búsqueda de la felicidad, de una vida sencilla pero verdadera, de la esencia del hombre. Todo ello en una prosa muy bella, clara, precisa y sensorial. “Fui a los bosques porque quería vivir intensamente; enfrentar solo los hechos esenciales de la vida. Llevar la vida a un rincón y reducirla a sus menores elementos”.